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¿Sábila con miel para que enfermedades me puedan coadyudar?

La sábila, también conocida como aloe vera, es una planta con múltiples propiedades medicinales y beneficios para la salud. La miel, por su parte, es un alimento natural que también aporta nutrientes y antioxidantes. ¿Qué pasa si combinamos estos dos ingredientes? ¿Qué enfermedades se pueden coadyudar o  prevenir?

Gastritis y otros problemas estomacales

Uno de los usos más comunes de la sábila con miel es para tratar la gastritis y otros problemas estomacales, como la colitis, el estreñimiento o las úlceras. Esto se debe a que ambos ingredientes tienen un efecto antiinflamatorio, cicatrizante y antibacteriano, que ayuda a proteger y regenerar la mucosa gástrica. Además, estimulan la digestión y favorecen el equilibrio de la flora intestinal.

Para preparar este remedio, se necesita un tallo de sábila, dos cucharadas de miel y una taza de agua. Se pela el tallo de sábila y se lava bien para eliminar la secreción amarillenta que tiene un sabor amargo. Se licúa todo junto y se toma antes de cada comida, durante una semana como máximo.

Diabetes

Otro beneficio de la sábila con miel es que puede ayudar a regular el nivel de azúcar en la sangre, lo que es beneficioso para las personas con diabetes o prediabetes. La sábila contiene minerales como el cromo, el magnesio y el zinc, que mejoran la sensibilidad a la insulina y previenen las complicaciones diabéticas. La miel, por su parte, tiene un equilibrio de fructosa y glucosa, que no eleva tanto el índice glucémico como el azúcar refinado.

Para aprovechar este efecto, se puede tomar una cucharada de gel de sábila mezclada con una cucharada de miel en ayunas, todos los días. También se puede agregar un poco de jugo de limón para potenciar el efecto hipoglucemiante.

Infecciones respiratorias

La sábila con miel también puede ser un buen aliado para combatir las infecciones respiratorias, como la gripe, el resfriado, la bronquitis o la sinusitis. Esto se debe a que ambos ingredientes tienen propiedades antibióticas, antivirales y expectorantes, que ayudan a eliminar los microorganismos causantes de la infección y a expulsar las flemas. Además, fortalecen el sistema inmunológico y alivian los síntomas como la tos, el dolor de garganta o la fiebre.

Para preparar este remedio, se necesita medio tallo de sábila, dos cucharadas de miel y el jugo de un limón. Se pela el tallo de sábila y se corta en trozos pequeños. Se pone todo en una olla con agua y se deja hervir durante 15 minutos. Se cuela y se deja enfriar. Se toma una taza tres veces al día hasta mejorar.

Referencias

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